Me van a permitir contarles la historia, un tanto especial, de cómo he tejido estos gorros bufandas tan bonitos.

Navegando por internet me encontré el diseño de estos gorros capuchas tejidos con lana gruesa y me dije …»seguro que tendré el placer de  tejer estos gorros tan originales y divertidos mas adelante» seguí con mis quehaceres y atendiendo otros pedidos sin reparar en mi pensamiento.

Una madre preocupada

Olvidada ya,  aparece el email de Teresa,  una madre preocupada porque su hija pequeña de 3 años pasa mucho frío en el patio del colegio y  con el inconveniente de que la maestra no les permite llevar a sus alumnas las bufandas clásicas por el peligro que conlleva de estrangulamiento. Con este panorama, Beatriz me sugiere hacerle para la niña una bufanda que se alarga en anchura hasta convertirse en gorro…bien…  busco diseños que se ajusten mas o menos a su pedido pero me encuentro con la grata sorpresa de que la mamá de la niña quiere uno de esos gorros bufandas con orejitas que tanto me gustaron en su momento. ¡Estupendo! voy a recrearme en la confección de esta preciosidad de gorro de lana gruesa.

Después de ponernos de acuerdo con el color ( un rosa fresa) y un precio, me pongo manos a la obra. Voy a la red y entro en la página web del diseñador de estos gorros ( thevelvetacorn) y compruebo que vende los patrones en PDF a un precio aceptable, no lo dudé y lo compré. Después de interpretar los patrones en inglés ( cogí experiencia con los patrones de amigurumis), hago pequeñas muestras con agujas y grosor de lanas y me pongo a tejerlos. Cuando lo termino ( con el envío de la foto) me comenta Teresa que tiene otra hija mayor y que para evitar «celos» entre hermanas que le hiciera otro exactamente igual.

Otras dos hermanas

La experiencia no termina aquí, aparece otro pedido sorprendentemente para otras dos hermanas con un diseño muy parecido al realizado en rosa sólo que ahora la mamá de estas dos niñas me lo pidió en un color rojo intenso….

Decirles que ha sido un placer confeccionar estos 4 gorros con la ayuda de mis otras dos compañeras de tricotonas y por supuesto con las mamás de las niñas que me han dado la oportunidad de mejorar y hacerme tremendamente feliz.

Con ganas de volver hacerlos.

De vuelta en esta fecha navideña, diciembre de 1015, me complace compartir con ustedes los gorros que hemos elaborado desde la publicación de este post. Les adjunto fotos:

Un  saludo. Mary XXX